La exhalación forzada ha sido una de las prácticas más comunes en las clases de preparación al parto. Es esa respiración en la que se alarga la exhalación y se fuerza la misma, frunciendo los labios o pronunciando una “S” o una “F”, muy forzada.
El motivo principal para realizar esta práctica es el de trabajar el transverso abdominal y fortalecerlo de cara a tener mucha fuerza en el abdomen y pujar con fuerza en el parto.
Sin embargo, esta práctica está contraindicada en el embarazo porque pone en serio riesgo a la diástasis abdominal. En el vídeo te explico cómo ocurre esto.