\u00abDe nuestro trabajo anterior, sabemos que cuando la conexi\u00f3n neuronal entre madres y beb\u00e9s es fuerte, los beb\u00e9s son m\u00e1s receptivos y est\u00e1n listos para aprender de sus madres\u00bb<\/em>, explica Vicky Leong, directora del estudio.<\/p>\n\u201cEn esta etapa de la vida, el cerebro del beb\u00e9 tiene la capacidad de cambiar significativamente, y estos cambios son impulsados \u200b\u200bpor las experiencias del beb\u00e9. Al usar un tono emocional positivo durante las interacciones sociales, los padres pueden conectarse mejor con sus beb\u00e9s y estimular el desarrollo de la capacidad mental de su beb\u00e9<\/em>\u00ab, a\u00f1ade Leong.<\/p><\/blockquote>\n\u00bfQu\u00e9 ocurre cuando la madre tienen depresi\u00f3n?<\/h4>\n
Los resultados tambi\u00e9n sugieren que los beb\u00e9s de madres deprimidas pueden mostrar menos evidencia de aprendizaje debido a una conexi\u00f3n neuronal debilitada entre la madre y el beb\u00e9.<\/p>\n
Las madres que experimentan un estado mental bajo o negativo debido a la depresi\u00f3n cl\u00ednica tienden a tener menos interacci\u00f3n con su beb\u00e9.Su voz es de tono m\u00e1s plano, hacen mucho menos contacto visual y es menos probable que respondan cuando su beb\u00e9 intenta llamar su atenci\u00f3n.<\/p>\n
\u00abNuestras emociones literalmente cambian la forma en que nuestros cerebros comparten informaci\u00f3n con los dem\u00e1s; las emociones positivas nos ayudan a comunicarnos de una manera mucho m\u00e1s eficiente\u00bb<\/em>, explica Leong.<\/p>\n\u201cLa depresi\u00f3n puede tener un poderoso efecto negativo en la capacidad de las madres para establecer conexiones con su beb\u00e9. Todas las se\u00f1ales sociales que normalmente fomentan la conexi\u00f3n est\u00e1n menos disponibles para el ni\u00f1o, por lo que el ni\u00f1o no recibe el aporte emocional \u00f3ptimo que necesita para prosperar\u00bb<\/em>.<\/p><\/blockquote>\nUna raz\u00f3n m\u00e1s para cuidar a la madre durante el puerperio.<\/p>\n
Tras el parto las mujeres vivimos inmersas en un torbellino emocional que puede ir desde el mayor \u00e9xtasis a la oscuridad m\u00e1s profunda. El vaiv\u00e9n emocional es hasta cierto punto normal por todo el cambio hormonal que supone el parto, la lactancia, la falta de sue\u00f1o y la recuperaci\u00f3n f\u00edsica posparto. Sin embargo hay que cuidar de que el cansancio y el estr\u00e9s que supone este cambio dr\u00e1stico en la vida de toda mujer no acabe llev\u00e1ndola a una tristeza prolongada y la depresi\u00f3n.<\/p>\n
Aunque exista cierta creencia de que la depresi\u00f3n posparto es normal, no lo es en absoluto y es necesario actuar.<\/p>\n
No es solo la salud de la madre la que est\u00e1 en juego. La psique del beb\u00e9, su desarrollo neurol\u00f3gico y su capacidad de aprendizaje tambi\u00e9n dependen de la calidad de su relaci\u00f3n con la madre en estos primeros meses de vida.<\/p>\n
\u00bfQu\u00e9 se puede hacer?<\/h4>\n
La primera premisa es darse cuenta de que esa tristeza no es normal y lo segundo es pedir ayuda. Es el momento para la madre de ser ego\u00edsta en el m\u00e1s positivo de los t\u00e9rminos y cuidarse a s\u00ed misma en primer lugar. \u00bfC\u00f3mo se puede cuidar de un beb\u00e9 si no te puedes cuidar a ti misma?<\/p>\n
La pareja, la familia y la sociedad entera deben volcarse para que la madre puerpera no tenga preocupacione, que se le procure suficiente tiempo de autocuidado diario y, si es necesario buscar ayuda profesional.<\/p>\n
Wilhelm Reich dijo que el mundo no cambiar\u00eda hasta que el bienestar de la criatura reci\u00e9n nacida no prevaleciera sobre cualquier otra consideraci\u00f3n.<\/p><\/blockquote>\n
Para cuidar del reci\u00e9n nacido es necesario comenzar por cuidar la salud de la madre, pues es la madre su nexo de uni\u00f3n con el mundo y seg\u00fan como sea la calidad de la relaci\u00f3n con ella as\u00ed ser\u00e1 la relaci\u00f3n del ni\u00f1o con el mundo que le rodea en el futuro.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"
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